Palíndromo III

Una profecía maldita (consecuencia de una invocación, un avistamiento y una abducción) parece ser la responsable de una serie de muertes producidas por causas muy diversas en distintos puntos del planeta. La imposibilidad de relacionar fallecimientos tan dispares como un asesinato, un accidente, un infarto o una enfermedad terminal en lugares geográficamente alejados supone un claro jaque a la racionalidad, máxime cuando las víctimas son los propios invocadores. Para hacer el rompecabezas más irresoluble aún, cada “maldito”, en el momento de su muerte, porta un amuleto con su inicial, y dichas iniciales, en conjunto, forman la palabra “malditos”.

La precoz Julieta, que a sus once años está participando en un concurso de palíndromos para jóvenes talentos, se niega a aceptar las sobradas evidencias sobrenaturales y, en una nueva lucha contrarreloj que amenaza a una persona de su entorno, trata de encontrar una respuesta coherente al mayor laberinto intelectual con el que se ha enfrentado jamás. Pero los acontecimientos sucesivos son tan contundentes que debilitan cualquier solución racional del complejo puzle.

Tercera entrega de la trilogía Palíndromo, el psicopuzle de desenlaces imposibles.

NOTA: Un palíndromo es una frase simétrica, reversible o capicúa, como la siguiente:

AL AMARGOR, PROGRÁMALA  (ALAMARGORPROGRAMALA)